¡Cuánta gente hay en el mundo, querido lector! Y, sin embargo, no encontrarás dos personas iguales. Cada uno de nosotros contamos con detalles en nuestra forma de ser, matices en la personalidad que nos hacen únicos e irrebatibles. Cada uno de nosotros tenemos unos dones preciosos a desarrollar, que nos hacen muy especiales. ¿Tu conoces tus dones, amigo lector?